Los idus, por ejemplo eran los días 13 de cada mes, excepto en marzo, mayo, julio y octubre que se celebraba el día 15. Entre ellos destaca el conocido como "idus de marzo" que designaba al día 15 del mes dedicado al dios de la guerra Marte, el mes de Martius según los romanos. O lo que es lo mismo, el 15 de marzo para los hispanoparlantes. Otras referencias del calendario romano eran las calendas (el primer día de cada mes) y las nonas (el quinto día de cada mes excepto en marzo, mayo, julio y octubre, que era el séptimo día). Estos días eran jornadas de buenas noticias, sin embargo, los caprichos de la historia hicieron que uno de estos días el propio Julio César fuera asesinado en el año 44 a.C. De hecho, según apuntaba el propio escritor griego Plutarco, César fue advertido del peligro, pero lo obvió y el idus de marzo de ese año se tiñó de sangre. Según el texto de Plutarco, "Lo que es más extraordinario aún es que un vidente le había advertido del grave peligro que le amenazaba en los idus de marzo, y ese día cuando iba al Senado, llamó al vidente y riendo le dijo: «Los idus de marzo ya han llegado»; a lo que el vidente contestó compasivamente: «Sí, pero aún no han acabado»". Incluso años más tarde el propio Shakespeare haría famosa la frase "¡Cuídate de los idus de marzo!" (Beware of the ides of March, en su versión anglosajona original) a través de su obra Julio César, de 1599, en la que recreaba la conspiración que acabó con el asesinato del mandatario.
"Los datos de ayer son agua pasada, pese a mostrar su cara más fea (Paro sube en 2.231 personas en febrero, peor registro en este mes desde 2013) Importa el presente y esa indeseada Ley de Murphy "Si algo puede salir mal, saldrá mal" comienza a instalarse en amplias capas de la sociedad española, aterrada por el paro y la incipiente parálisis económica, ahora que todo apuntaba mejor. Hemos consumidos meses del año y España sigue avanzando. No hay una parálisis total, pero sí muchos frenazos en seco generado en el gallinero político ¿Se imaginan un Reino de España paralizado de nuevo sin rescates, ni ayudas, ni bonos especiales, ni gaitas que tocar y escuchar? El año pasado fue malo en términos de Bolsa, pero bueno en lo que respecta a crecimiento y generación de empleo. El actual ha amanecido con el estoque en la mano para las Bolsas, que ahora levantan cabeza, justo cuando muchos claudicaron. Pero puede ser el remate final si el denominado factor político lo contamina todo...".
"Los negocios muestran un pulso más preceptible. A muchos empresarios y autónomos las cuentas les cuadran de una u otra manera. Pero el gallinero político nos puede dejar, de nuevo, sin capacidad de respuesta a la crisis, sin margen de maniobra, porque el crédito, que ha comenzado a fluir, puede dejar de hacerlo en un abrir y cerrar de ojos. Un carajal político nos pondría, otra vez, con el aliento de los ricos del Norte de Europa en la nuca de los pobres del Sur...".
"La gente comienza a incomodarse, prevé que si vamos a un puzzle político desajustado y desordenado, los logros conseguidos, las buenas amistades selladas con Europa pueden quebrarse. Empeoran lentamente las expectativas y, conforme pasa el tiempo, cunde el desánimo, la percepción de que aquí cada uno va a lo suyo y que eso del Bien Común es una martingala ¿Qué podemos esperar a corto y medio plazo? Tener horizonte de miras. Todos en común. Es la hora de los políticos", me dice uno de mis gurús favoritos.
Retomo algunos casos reales de los que ya he escrito en alguna ocasión. He vuelto a hablar con los protagonistas:
*María José Lleva más de 30 años de funcionaria en un ministerio. Enviudó joven hace poco. Ayer volví a verla. Me contó que "la parálisis se nota, aunque de una manera brutal"
*María dirige una de las principales gestorías administrativas de España. La sede central la tiene en Barcelona, pero con delegaciones en Madrid, Bilbao, La Coruña, Valencia, Sevilla y demás provincias punteras. Me ha dicho que el año pasado fueron muy bien las cosas. En los dos primeros meses del actual apenas han formalizado gestiones administrativas.
*Pablo regentaba un concesionario de coches de gama media. Me dice que el año pasado fue espectacular respecto a años anteriores y que el arranque del actual es muy bueno
*Andrés ha llegado a tener cinco licencias de taxi en Madrid. Ha tenido que volver al tajo, ya con edad avanzada sigue conduciendo un solo taxi. El sector no tira. Hay mucha competencia y pocas ganar de gastar en taxis. Las empresas, además, ya no pagan las facturas a los empleados
*Pedro tenía un restaurante en Bilbao, con un precio medio de 40 euros por persona. Ha rebajado los precios a la mitad. Y funciona
*Agustín es agricultor, un agricultor importante. Gracias a las subvenciones vive bien
*Alicia dirigía una empresa de ingeniería . Hace dos años estuvo a punto de cerrar por falta de pedidos. El año pasado fue muy bueno y este puede ser mejor si los políticos no lo joden todo, como siempre
*José Miguel tuvo una flota de camiones. El año pasado comenzó a trabajar poco a poco. Los dos primeros meses del año han sido buenos
*María Antonia heredó tres panaderías de sus padres, que, a su vez, heredaron de sus abuelos. Cerró dos pòr la competencia desmelenada. Ahora va mejor. El consumidor quiere calidad
*Felipe tiene una tienda de ordenadores: "Éramos cinco en plantilla. Ahora sólo trabajamos mi mujer y yo. Las cosas comienzan a funcionar lentamente"
*Luis Antonio es uno de los cientos de chapuzas que pululan por este país: "En los últimos diez años llegué a formar una cuadrilla de 15 albañiles, pintores incluidos. Ahora estamos en la empresa un rumano y yo. El rumano, en cuestión, dice que ya no se va de España. Ha vuelto la actividad, aunque no como hace años